Entre la amplia gama de equipos que pueden utilizarse para el entrenamiento se encuentra el tubo frontal. Se trata de un equipo cuyo uso es relativamente reciente y surge de la necesidad de obviar el obstáculo de la respiración en el estilo libre y centrarse en una serie de aspectos ligados a otros factores (posturales, coordinación, equilibrio y distribución del peso, etc.) e intervenir para corregirlos o perfeccionarlos sin que el movimiento giratorio de la cabeza durante la respiración interfiera en la percepción del movimiento.

Como todas las herramientas, debe utilizarse con fines bien definidos y necesita un periodo de adaptación. Si nunca la ha utilizado, al principio puede ser útil equiparse con un tapón nasal para evitar desagradables lavados nasales con cada inhalación.

• posibilidades de uso de la boquilla
• ejercicios de piernas sin tabla
• ejercicios de técnica de natación
• ejercicios de respiración
• entrenamiento condicional

Posibilidades de uso de la boquilla

Con este aparato de natación, se puede desarrollar un trabajo de piernas que sería difícil con una tabla, especialmente para los principiantes en natación. De hecho, hay que "domar" la tabla, y para ello se necesita la orientación adecuada (pero incluso con eso, puede que no se consiga el resultado deseado). Sin esta habilidad, es probable que el trabajo de piernas se viva con frustración y se asocie a una fatiga innecesaria, con la sensación final de haber perdido sólo el tiempo.
Con el tubo, en cambio, se puede establecer la postura correcta para un uso eficaz de las piernas: la cabeza, apoyada en la superficie del agua, y la mirada, dirigida hacia el fondo de la piscina, permiten levantar la pelvis, reduciendo la fricción a medida que se avanza.

Ejemplo práctico: realizar distancias cortas utilizando únicamente las piernas. Los brazos están paralelos, estirados hacia delante; los codos extendidos y las manos colocadas a unos 20 cm por debajo de la superficie del agua; la mirada hacia abajo. Al avanzar, las piernas deben romper firmemente la superficie del agua. El entrenador puede influir en la eficacia del gesto ajustando la anchura del gambito, la distancia entre las rodillas y entre los dedos de los pies.

Al utilizar el snorkel, como no tenemos que girar la cabeza para respirar, podemos centrarnos en la dinámica de los movimientos y desarrollar ejercicios de técnica orientados a la coordinación.

Ejemplo práctico: podemos establecer ejercicios de privación y aislamiento, es decir, trabajar con un solo brazo a la vez, para centrarnos en la rotación y el balanceo de los brazos. Estabilizando la línea de flotación con el tubo (ver postura), se puede jugar con la posición del brazo inmóvil (delante o a lo largo del cuerpo). Esto permite adquirir nuevas habilidades para utilizarlas en la natación regular con dos brazos.

La respiración es siempre el aspecto más delicado e importante a tratar en natación: el tubo ayuda a desarrollar la conciencia.

Ejemplo práctico: puedes establecer un ritmo respiratorio continuo entre inhalación y exhalación, con el objetivo de no tener interrupciones. Si tienes un lado de respiración preferido (por ejemplo, el lado derecho), en la fase de tracción del brazo (brazo derecho), realiza la inhalación, mientras que en la fase de tracción del brazo opuesto (brazo izquierdo) realiza la exhalación. El objetivo es que el ritmo de la respiración marque el ritmo de la tracción del brazo.
Esta puede ser una forma de establecer el control de la respiración a través de la conciencia. El objetivo, por supuesto, será después aplicar lo aprendido con este ejercicio a la natación regular.

El snorkel también puede utilizarse en el entrenamiento condicional: al forzar los músculos respiratorios, se desarrollará la "capacidad vital".

Ejemplo práctico: repeticiones en distancias cortas y medias (25 m - 50 m - 75 m) pero a alta intensidad. Los estilos más adecuados son el estilo libre y el delfín, ya que los deportistas que compiten en 50 m tienden a minimizar la respiración, y el tubo ayuda a fijar la postura, la frecuencia y la coordinación pierna-brazo.

Tras un breve periodo de adaptación, sólo la imaginación puede limitar las aplicaciones del tubo bucal (bueno, quizá no sea ideal para uso supino: en la espalda podemos tener un molesto "efecto paja"). Bromas aparte: el tubo bucal es una herramienta que puede ser conscientemente adictiva, siempre que tengamos claro para qué queremos usarla.

Mauro Lanzoni, ENDU Channel. 

Come usare il boccaglio in allenamento - ENDUchannel